La mitología que rodea a Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota tiene varias fechas del calendario que son importantes de recordar.
En un nuevo 28 de diciembre, los fanáticos invadieron las redes sociales con saludos y posteos alusivos a la mítica banda de rock nacional porqué, quizás, todo comenzó un Día de Los Inocentes. De hecho, existen varias versiones de por qué la leyenda surgió en este día, ninguna confirmada debido al hermetismo adoptado como forma de vida.
“Seguramente todo empezó un 28 de Diciembre, un día de los inocentes. Ese día nos habremos conocido”, explicó Skay, el corazón de Patricio Rey, en una entrevista en la Rock&pop hace más de dos décadas.
La banda platense tuvo sus primeros ensayos y proyectos en medio del primer año de la dictadura cívico-militar en 1976 en un sótano de La Plata. Allí Carlos “Indio” Solari, Eduardo “Skay” Beilinson y Carmen “La Negra Poli” Castro se conocieron.
Otra versión, indica que se debe a su primera presentación en Salta un enero del año 1982 en un bar llamado “El Polaco”.
En 1982 “el rumor que tocábamos ese 28 ya venía circulando desde hacía bastante tiempo, y cuando se supo que había gente que no iba a poder llegar se decidió postergarlo”, contó el guitarrista. Ese día la banda iba a presentarse en Teatro Bambalinas, pero un accidente en la ruta camino a Bs. As. cortó los accesos y no pudieron llegar. Por eso, el concierto tuvo que ser cancelado.
Algunos fanáticos recuerdan que colgaron en la puerta del teatro un cartelito que decía algo así como “Show suspendido. Feliz día de los inocentes” o, según otras versiones, “Show suspendido: Patricio Rey está festejando su cumpleaños, feliz día de los inocentes”. Obviamente, en ese entonces, todavía no existían las redes sociales.
Además, realizaron varios conciertos épicos en esa fecha: en Paladium (1985), en Obras (1991) y en el Estadio Unión de Santa Fe (1996) fueron algunos.
Hace algunos meses, las redes se revolucionaron al descubrir que hay un canal de Youtube que sube gemas inéditas con una excelente calidad y sonido, sin que sea demandado por uso indebido del copyright. Entre tanta teoría, hay un dato que no podemos dejar pasar: la cuenta se llama "El Ghetto de los pibes", mismo slogan que decía Solari en la canción "Esto es to-to-todo amigos".
Para la mayoría de los ricoteros, más que una banda de rock, es una religión, una forma de vida. De hecho, hay un ritual sonoro a cargo de los fanáticos que no puede faltar: “solo les pido que se vuelvan a juntar”, suplicando una misa más. Se lo cantan a Skay, mientras sigue girando con Los Fakires, y también en los recitales los Fundamentalistas, siempre “presos de una ilusión”.
Desde los sótanos hasta los estadios de fútbol, con posters, grafitis, cassettes, banderas, remeras y tatuajes. Sin prensa, con letras crípticas y muy políticas, una gráfica inconfundible y un sin fin de cosas adjudicadas a la mística, a 47 años de su nacimiento, los ricoteros, nuevos y viejos, siguen demostrando su devoción por Patricio Rey.
