Dentro del mundo del rock la banda californiana es una rara avis, no sólo por su estilo único, sino porque para ser miembro de ella y crear esos sonidos hay que ser un ser igual de particular.
En este caso, el virtuoso baterista Danny Carey demuestra que no sólo es un mastodonte de 1,96 de altura que le pega a los parches como nadie, sino que también es un gran inventor.
Para mantener en forma ese cuerpito y también su cerebro, creó la “bicibatería”. Así nomás. En el video que publicó en su canal de Youtube se lo puede ver montado a una bicicleta fija a la que adaptó para no dejar de tocar la batería mientras pedalea.
En lugar de tener una pantalla con los indicadores habituales que suelen tener estos aparatos, le adaptó un pequeño tamborcito en el sigue practicando sus redobles y técnicas.
“Es una forma ingeniosa de combinar ejercicio y práctica de batería, especialmente cuando estás de gira y no siempre tienes acceso a un set completo de batería”, comentó Carey en el video.